El discurso de la muerte
Tenia un amigo, con el cual siempre jugaba ajedrez, con el descubrí que jugando ajedrez uno podia agarrar una nota y por lo menos dos veces jugamos tanto que terminamos alucinando, y no es joda, yo vivía a cuatro cuadras de su casa y aun no se como llegue a mi casa,, ya que veía una pradera con flores multicolores y riachuelos de miel,
Como vivía en USA tenia tiempo sin vernos, el iba a venir este fin de semana, para supuestamente “volverme mierda, y limpiarse el rabo con mi dignidad” O por lo menos eso es lo que el creía, ya que seguramente yo lo iba a destruir y luego comerme el bagazo. Ya me estaba preparando para un maratón de ajedrez, con el método usual, levantar 200kg, correr 50 km diarios, hacer 2000 lagartijas. Lo usual.
Ayer me entere que murió de un ataque al corazón, termino genérico, para indicar que murió de una vaina. El estuvo en una expedición de recolección de plantas en las selvas del amazonas, donde a pesar que dormíamos en hamacas contiguas, el agarro malaria y yo no. Creo que eso tuvo que ver, ya que para quienes no lo saben, la malaria no se cura.
Vivimos y hacemos planes pensando que somos inmortales, que tenemos todo el tiempo del mundo, nos enzarzamos en discusiones fútiles, antes la inminencia de la muerte, es lo único verdadero.
Cuando tenia unos 8años supe que me iba a morir, pensaba que eso era injusto y me prometí que cuando grande investigaría y trataría de encontrar una cura a esa enfermedad, tenia algunas ideas algo locas, pero por eso quise estudiar biología. Cuando ya siendo estudiante me di cuenta que si era posible, por lo menos parar el envejecimiento y alargar mucho la vida, me cambie a otra rama, si alguien lo logra será peor que una guerra nuclear.
Todos tenemos que morir, para poder tener hijos. No podemos tener ambas.
Esta civilización niega la muerte, pero no por eso esta se hace inevitable, la muerte no es un tema de conversación muy popular. Todos tratan de evitarlo.
Acumulamos dineros y cosas, como si fuésemos a vivir para siempre, decimos que vamos morir por un ideal, la patria, la libertad, con la idea implícita que serán los otros quienes morirán, pero no nosotros. Nosotros vamos a regresar a ver la amante, la esposa y los hijos (en ese orden) y luego contaremos nuestra historia llkena de mentiras en History Chanel, o Biografia, para luego morir como unos canallas en la cama rodeados de los buitres.
Antes la muerte todos nuestros logros, todos nuestros exitos y fracasos pierden importancia.
II
Para nosotros, la muerte se ha convertido en cotidiano, pero no la vemos tan frecuentemente, como en nuestras barriadas, en ellas ver un cadáver tirado en la calle o en una de las escaleras del barrio es lo frecuente, lo ven un día si y el otro también.
Creo que ese contacto con la muerte cotidiana, ha cambiado la mentalidad de muchas de las personas de los barrios, ya que buscan huir de ello, con el alcohol, las drogas o las religiones, por eso las niñas de 12 0 13 años suelen embarazarse, y la moral de la sociedad se resquebraja frente al cadáver que se pudre en la calle bajo el sol, y al miedo omnipresente de saber que en cualquier momento alguien comenzara a disparar, o nos robaran, o violaran.
Y no es solo una expectativa, es solo esperar el día, ya que nos sucederá. Es por eso que nosotros no comprendemos cabalmente a quienes habitan en las barriadas de nuestro país. No solemos vivir eso. Estamos relativamente seguros en nuestras casas.
Podemos hacer planes, pensar que vamos a estudiar una carrera, nos casaremos, tendremos hijos y engordaremos. Podemos vivir en el futuro, ellos, por el contrario, hacer esos planes es algo ilusorio, una tontería ¿pasarse 5 años en la universidad’ ¿Cómo?, si apenas podemos estar seguro que viviré mañana. Hacer planes para más de 15 días es algo que le cuesta trabajo, no lo piensan conscientemente, sino en un nivel mas profundo que solo se expresa en sus acciones.
El gobierno se aprovecha de ello, las personas que viven en los barrios saben que si tienen buenas relaciones con los matones del barrio, sus probabilidades de vivir aumentan un poco más y por eso tienen esa relación emocional con quienes tienen las armas. No estoy diciendo que los respeten, o que le tengan aprecio, sino algo mas elemental; les temen.
Es por esa razón por la cual Chávez siempre hace mención que “esta es una revolución pacifica, pero armada”, el mensaje implícito es que si estas con el no te hará daño, pero si no lo estas… ya sabes, las armas.
Lo anterior esta en consonancia con su discurso agresivo contra los que quienes aversar su gobierno. Ese es el lenguaje, gestual que entienden las personas de nuestras barriadas, para ellos la muerte no es algo metafísico, es la cotidianidad, la imposición por las armas, no es algo que se ve en el cine, si no todos los días.
Los cobros de peaje por subir a a la casa es lo normal, todo eso con la amenaza de las armas ¿como cambiaria nuestra conducta si para subir a nuestros apartamentos tendríamos que pagar un peaje?
Se sigue al fuerte, no al pacifista melindroso, lo repito, no es que tenga una conexión de liderazgo, si no que se le teme, eso es lo que ellos están acostumbrados. No es la pobreza en si, que hace eso, si no la cotidianidad con la muerte, es la manera como viven; El hacinamiento y la ausencia de ley o de del estado y por lo tanto solo el mas fuerte o el que tenga las armas mas grande prevalece
El discurso de quienes están contra este gobierno va dirigido a personas como nosotros, los que no pagamos peaje con la amenaza de un arma para subir a nuestros apartamentos, si no a ellos, los que para ir al colegio tienen que pasar sobre un cadáver, y con temor de no verle mucho la cara. No valla a ser que.
Se han escrito miles de toneladas sobre la muerte, pero ahora la utilizamos para gobernar, en los mismos USA se utiliza el temor para erosionar los valores democráticos las leyes antidrogas y antiterrorismo son algo que no deberían de existir en una sociedad libre, y no se deberían de permitir. Cualquier persona medianamente conciente, las debería de denunciar, pero no lo hacen por el temor. Bin Laden ha hecho mas para destruir las sociedades libres de lo que imagino al sembrar el miedo y que las personas cedieran su libertad, por una supuesta seguridad.
Eso mismo hacen las personas en nuestras barriadas con los matones, es el mismo esquema del cual se aprovecha chavez. Para realizar política.
Ciertamente el discurso agresivo le da resultado ya que va directamente a sus temores más profundos, a lo que viven en el día a día. El temor a la muerte
El discurso de la muerte
Etiquetas: autobiografia, pobreza, politica
2 comentarios:
Amaneció un día en la Zona Central del 23 de enero. Yo apenas me quitaba las legañas cuando mi abuela se arreglaba apurada para salir. La detuvo mi pregunta cuando metía la llave en el cilindro de la reja:
–Mami, ¿para dónde va?
- Atrás amaneció muerto un taxista. La gente está allí viéndolo. Me dicen que el balazo lo dejó recostado sobre el volante. ¡Voy a verlo antes de que la policía llegue!
Terminó de girar la cerradura y salió entusiasmada a ver la función a una cuadra de la iglesia de Cristo Rey. Ni siquiera su fe católica la frenó, la hizo reflexionar. Se trataba del padre, del hijo, amigo, vecino de alguien a quien le habían arrebatado la vida, sus amores, la esperanza, sus sueños. Un hombre a quien habían matado dos veces: la primera de un balazo y la segunda, las miradas curiosas que veían su sangre secarse como si se tratara de un micro de un programa matutino de variedades.
Así es la muerte en los barrios. Temor para algunos, entretenimiento para otros. Quizás por ello mi abuela no se ha cansado de votar por Chávez, el animador más grande de nuestro siglo XXI.
Casi lo olvido, o quizás fue mi subconsciente haciéndome ver que no soy mejor que ningún fisgón, indistintamente, lamento mucho la muerte de tu amigo.
Lo siento.
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